Dirigentes: Como sucede en cada final se hacen presentes dirigentes de OFI. En este caso estuvo, como suele hacer en cada instancia, el Presidente Sebastián Sosa, quien estuvo en cancha antes y por supuesto después del partido para entregar medallas y copas.
Concejeros: También se hicieron presentes los consejeros Carlos Alaniz y por supuesto Fernando Varela, y Ana Zeni encargados de Protocolo de OFI así como la rochense Miriam Brañas del Departamento de Futbol femenino de OFI. La veedora administrativa fue Carmen Núñez.
Locataria: En el caso de Ana Zeni, además de consejera integrante de Protocolo fue anfitriona ya que reside en la ciudad. De hecho fue la encargada junto al Presidente Sosa de entregar la “orejona” a la capitana sanducera Brisa Nicheglod.
Protocolo: Precisamente como sucede en cada partidos de finales, el equipo de protocolo de OFI está desde el día anterior ajustando todos los detalles para que nada salga mal. Se preocupan hasta de cosas que parecen obvias pero que a la hora de una final pueden pasar. Una vez mas y no nos cansamos de señalarlo, con rigor profesional se cumple el trabajo de Protocolo.
Ausencia: Lamentablemente un partido que debería haber sido visto por miles de espectadores se redujo apenas a no mas de 500 personas, siendo muy generoso en la opinión. Lo cierto es que la televisión no estuvo y eso redujo la visibilidad que debería tener el futbol femenino.
Televisación: Las cosas como son. Pese a los esfuerzos de Consejeros de OFI por poder televisar esta final, la dirigencia de Litoral no quiso jugar el sábado a la noche ni el domingo a las 14 horas, que eran los horarios que se disponía de pantalla. Pese a la insistencia entre semana no hubo acuerdo y en definitiva perdió, -una vez más-, el futbol femenino. Una lástima.
Enemigos: Lamentablemente también hay que señalar que a la hora del partido, en una final con un representante del fútbol sanducero, también había futbol local en otras canchas, lo que habla de una situación que no se entiende. En lugar de promocionar como debe ser, el espectáculo mas importante para la ciudad en materia deportiva, se lo deja de lado.
Calor: Una tarde espectacular de sol al punto que a la hora del partido caía a pleno por lo que el público en la tribuna lateral habilitada, la Carlos Jaime
Sol lo tenían de frente. La habilitada detrás de uno de los arcos, se veía como parte del público se amontonaba en la sombrita que daba la torre de iluminación en esa esquina del estadio.
Sombra: En cambio en la tribuna principal, que aún no está habilitada para público debido a las obras realizadas, -pese a que las autoridades y quienes estaban vinculados a este encuentro se ubicaron en el palco- había una agradable sombra que la disfrutamos a pleno todos los que estábamos cumpliendo tareas, obviamente siguiendo las normas de protocolo dispuestas.
Arbitras: La verdad muchas veces se propone pero lamentablemente hay alguna razón por las cuales no luce. A que nos referimos? La cuarteta arbitral salió al calentamiento luciendo una coqueta camiseta azul que hacía referencia a la final pero además el rol de cada una. Todo por la tv, pero no se televisó. Una lástima.
Bengalas: La pasarela que “arma” Comisión de Protocolo para que ingresen al campo, las chicas/cos con las banderas de ambas instituciones junto a la de Fair Play y la de OFI por ese arco inflable, además de la cuarteta arbitral y la jugadora tiene su punto visual más destacado cuando se encienden las bengalas dándole un colorido bastante particular al espectáculo.
Amplio: La verdad que el estadio Artigas, remodelado por primera vez para la Copa América de 1995, luce lindísimo y además muy cómodo. Amplio con enormes espacios y con el verde artificial que va mas allá de los límites del terreno de juego con césped natural.
Locución: Antes de comenzar el evento y vale la pena destacarlo, un locutor animaba a las tribunas obviamente con su corazoncito volcado a las locatarias pero cumpliendo con el rol de “entretener” al público. Asimismo cuando se realizaban los cambios y al final, en la entrega de premios, también anunciando a las chicas que pasaban por el estrado.
Complemento: Estaría bueno como aporte al espectáculo que además al final, hubiera alguien de las visitantes, tirándole datos al locutor con los nombres de técnicos, capitana, dirigentes así como también alguien de OFI para que anuncie los nombres de los consejeros presentes.
Seguridad: Realmente poco trabajo para la gente encargada de la seguridad, por un lado por el público, relativamente poco para una final pero además el estadio en si tiene los dispositivos de seguridad que limitan los posibles incidentes. La hinchadas incluso sin contacto entre ellas.
Público: Como suele suceder en otras canchas y más si el campeón es locatario, generalmente las hinchadas invaden el terreno y festejan y a veces, hasta dificultan el trabajo de los medios de prensa. En esta ocasión, reiteramos por ser un estadio muy seguro, todo se hizo cómodamente para los medios y después si se permitió que ingresaran hinchas para las fotos y festejo con las jugadoras.
Ambulancia: Como debe ser, cumpliendo con las normas previstas la ambulancia a un costado, pero atentos por cualquier circunstancia. Cuando salió la jugadora Sofía Ruiz Díaz, un integrante del cuerpo técnico de Litoral acompañó a la jugadora que visiblemente dolorida en un brazo fue atendida en el vehículo sanitario.
Gesto: La de ambos equipos realizando la pasarela para que su rival fuera al escenario montado en el terreno de juego a recibir los premios. Es que debe entenderse que esto es futbol y de una final el título es para uno solo pero en definitiva, los dos son ganadores por haber llegado a esta instancia.
Copa: Esta es la tercera copa de clubes absoluta que obtiene el equipo de la avenida Chaplin de la capital sanducera ,aunque las otras anteriores las trajo de Salto y Florida. Esta coincide con que oficiaba de locatario en la revancha donde se definía el campeón.
ESCRIBE: Francisco Connio